Ronald Gladstone, kitchen steward, Culinary Union member since 1983 –

My wife and I bought our home in North Las Vegas in January 2020 right before the COVID-19 pandemic hit.

Before we bought our home, we rented a place for 16 years. The owners of the house we rented kept promising that they would sell us the house one day. We were always planning that we were going to buy the house, but one year turned to two years and every year it would be different excuse on why they couldn’t sell us the house.

Finally, my wife said “instead of paying someone else’s mortgage, let’s buy our own home!” We looked into the Culinary and Bartenders Housing Fund program and started the process of buying a home in 2019.

We wanted to move to North Las Vegas because there were a lot of new homes that were being built. We would always pass this particular tract where they were building new houses, but we never stopped in to check it out. One day we passed the tract, we stopped, and started talking to the people that were working there to build the houses. 

Turns out I went to school with the owner of the company and next thing we knew, we were picking our lot and starting building our first home. My wife and I have a beautiful one story, 3 bedroom, 2.5 bath home in North Las Vegas. 

It was important for us to be home owners because we have 4 kids, 11 grandkids, and we are getting older. We want to leave a legacy for our family – something to call our own instead of paying someone’s mortgage.

When the pandemic hit, my daughter and her partner lost their jobs and in November 2021 they had to move out because they couldn’t afford to pay the rent anymore, because my daughter was the only one that was working.

Now my daughter, her finance, and our grandchildren are living with us. We had to help them so they wouldn’t become homeless, so there are nine of us living here in my house right now. My wife and I, my daughter who is disabled, my other daughter, her finance, and their 4 children.

Rent prices are so high, it is a shame people have to live paycheck to paycheck and turn most of it over to rent. People don’t have the money or the credit right now to find affordable housing. The high rent prices are also pushing people into being homeless. I can’t imagine if my daughter didn’t have her parents here in Las Vegas, where she and her children would be. 

Workers are still recovering from the COVID-19 pandemic and I’ve seen families, including mine, really hit hard with high rents. As a North Las Vegas homeowner, I support the campaign to win Neighborhood Stability in my community because it’s good for everyone: Senior citizens – like my wife and I, long time residents, first-time homebuyers, parents with children, and local neighborhood business. Everyone deserve to live comfortably and have a place to stay.

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Ronald Gladstone, asistente de cocina, miembro de la Unión Culinaria desde 1983 –

Mi esposa y yo compramos nuestra casa en North Las Vegas en enero de 2020 justo antes de que llegara la pandemia de COVID-19.

Antes de comprar nuestra casa, alquilamos un lugar por 16 años. Los dueños de la casa que alquilábamos nos seguían prometiendo que algún día nos venderían la casa. Siempre estuvimos planeando que íbamos a comprar la casa, pero un año se convirtió en dos años y cada año era una excusa diferente de por qué no podían vendernos la casa.

Finalmente, mi esposa dijo: “en lugar de pagar la hipoteca de otra persona, ¡compremos nuestra propia casa!” Nos informamos sobre el programa de Fondo de Vivienda para Culinarios y Cantineros y comenzamos el proceso de compra de una casa en 2019.

Queríamos mudarnos a North Las Vegas porque se estaban construyendo muchas casas nuevas. Siempre pasábamos por este lugar en particular donde estaban construyendo casas nuevas, pero nunca nos deteníamos para hacer una consulta. Un día pasamos por el lugar, nos detuvimos y comenzamos a hablar con la gente que estaba trabajando allí para construir las casas.

Resulta que yo fuí a la escuela con el dueño de la compañía y lo siguiente que supimos fue que estábamos eligiendo nuestro lote y comenzando a construir nuestra primera casa. Mi esposa y yo tenemos una casa hermosa de una planta con 3 habitaciones y 2.5 baños en North Las Vegas.

Era importante para nosotros ser dueños de una casa porque tenemos 4 hijos, 11 nietos y nos estamos haciendo mayores. Queremos dejar un legado para nuestra familia, algo que podamos decir es nuestro en lugar de pagar la hipoteca de alguien.

Cuando llegó la pandemia, mi hija y su pareja perdieron sus trabajos y en noviembre de 2021 tuvieron que mudarse porque ya no podían pagar el alquiler, porque mi hija era la única que trabajaba.

Ahora mi hija, su prometido y nuestros nietos viven con nosotros. Tuvimos que ayudarlos para que no se quedaran sin hogar, así que somos nueve viviendo aquí en mi casa en este momento. Mi esposa y yo, mi hija que es discapacitada, mi otra hija, su prometido y sus 4 hijos.

Los precios de alquiler están tan altos que es una pena que la gente tenga que vivir de sueldo en sueldo y entregar la mayor parte para el alquiler. La gente no tiene el dinero o el crédito en este momento para encontrar una vivienda accesible. Los precios altos de los alquileres también están empujando a las personas a quedarse sin hogar. No me puedo imaginar si mi hija no tuviera a sus padres aquí en Las Vegas, donde estarían ella y sus hijos.

Los trabajadores todavía se están recuperando de la pandemia de COVID-19 y he visto a familias, incluida la mía, realmente afectadas por los alquileres altos. Como propietario de una casa en North Las Vegas, apoyo la campaña para ganar la Estabilidad del Vecindario en mi comunidad porque es buena para todos: personas de la tercera edad- como mi esposa y yo- residentes de muchos años, compradores de vivienda por primera vez, padres con hijos y negocios locales del vecindario. Todos merecen vivir cómodamente y tener un lugar donde quedarse.